Constitución Española Título Preliminar.

Artículo 2.

La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas. 


Editorial

Agosto de 2021

“No puede haber español digno de este nombre, que pudiera, sin sonrojarse, escribir que Gibraltar no es parte de España”, dijo Claudio Sánchez. Albornoz, presidente de la República Española en el Exilio (1940-1945).

Gibraltar español nace como plataforma en 2013. Su razón de ser, su propósito es impulsar un movimiento nacional para la descolonización del Peñón. El objetivo principal de nuestra plataforma de resistencia, es crear una conciencia sobre el problema. Organizar la causa democrática y coordinar el esfuerzo de todos, para conseguir la definitiva liberación del territorio de Gibraltar ocupado en la actualidad, por un asentamiento de colonos británicos de origen italiano, andaluz y marroquí


Nuestra Misión


Gibraltar es el emblema de un nuevo tipo de imperialismo colonial. Diseñado por especuladores Millonarios, enemigos declarados de la idea de las patrias y dedicados promotores del globalismo. Con libre tránsito de dinero, financiado por bancos, y ejecutado por la élite política mundialista, no nos extraña el magnetismo que el peñón ejerce sobre mercados financieros de todo el mundo. 


Y por favor, no se trata de ideas "conspiracionistas" sino de evidencias que tocan la misma estructura política de España y de otros estados de la Unión Europea. Solo hay que seguir las conexiones del dinero, las pruebas están ahí. Animamos al lector que investigue y se llevará más de una sorpresa. Descubrirá como Gibraltar se ha convertido en un lavadero de dinero negro para las organizaciones criminales, narcotraficantes, el yihadismo y en un sustancioso negocio asociado a la especulación inmobiliaria de patrimonio opaco. Así lo advierte un Informe de evaluación detallado de Gibraltar sobre lucha contra el blanqueo de capitales (AML) y la lucha contra la financiación del terrorismo. "El principal riesgo ALD para Gibraltar se encuentra en su sector profesional, que probablemente esté involucrado en la estratificación e integración del producto del delito. También existe cierto riesgo para Gibraltar en la etapa de colocación, en relación con el tráfico de drogas, el tráfico de migrantes y el crimen organizado en el sur de España. La Comisión de Servicios Financieros de Gibraltar ha establecido un marco sólido basado en el riesgo para las instituciones financieras para el blanqueo de capitales".


Gibraltar español no es una página de debate ni una página de noticias, nuestra web es una plataforma de información, coordinación y acción que se propone difundir y denunciar la vergonzosa situación que se vive en la Bahía de Algeciras por culpa de la presencia de una colonia británica. Hay que aclarar que somos una plataforma cívica democrática y participativa. y nuestro objetivo pasa por crear un cambio a través de la educación.


No disponemos de una estructura fija, sino que cada uno de los ciudadanos que quieran pueden unirse libremente y participar en nuestras actividades ya sea individual o colectivamente a través de asociaciones, clubs, plataformas o grupos. Se trata repito, de movilizar a los españoles, para dar la batalla por recuperar Gibraltar para España y concienciarlos de la importancia que esta misión tiene para nuestro futuro.  


El valor fundamental que encontrará el visitante en esta web, será el de cientos de datos contrastados y recursos para desmontar las mentiras de los colonos. Aquí no inventamos ni creamos rumores, ni pretendemos generar odio, aquí mostramos la verdad de una situación injusta que clama una solución. Y lo hacemos a partir de recursos sólidos y aceptados por el consenso general entre la comunidad de naciones democráticas en todo el mundo. 


Que no se confunda el lector, No deberíamos pensar que está pugna va solo de Gibraltar. En realidad se extiende más allá de las fronteras de la Bahía de Algeciras, más allá de Cádiz y de España. Los tentáculos se extienden al mundo entero, porque esto es una guerra contra la misma idea de globalización y miseria moral de los grandes especuladores financieros internacionales. Los promotores de la gobernanza mundial, que se mantienen conectados por estrechos lazos políticos, familiares y empresariales, a la colonia de Gibraltar


En este pequeño enclave español en manos británicas, ladrones, narcotraficantes y empresarios sin escrúpulos de todo el mundo, encuentran un paraíso propicio para blanquear su dinero de sangre. Se trata de una verdadera cueva de Ali-Baba protegida y administrada por las autoridades de la colonia. 


Pero no nos engañemos, no solo el crimen internacional ve en Gibraltar un refugio de piratas donde ocultar sus tesoros fruto del robo, la corrupción el tráfico de armas, drogas o para el terrorismo yihadista. Como no podía ser de otra forma, nuestros políticos, líderes y sindicatos españoles, muy listos ellos, también mantienen relaciones de interés con la colonia. 


En aras de la "concordia y la comprensión mutua para tender puentes de amistad" se han establecido  acuerdos que responden a la defensa de los intereses de la administración colonial frente a España y Europa (véase el tema de la verja y la defensa del espacio Schengen en las negociaciones BREXXIT como han presionado políticos locales y nacionales del PSOE)Y con su desinteresada gestión, estos políticos reciben sus treinta monedas. Así se entiende que, aún 300 años después, y pese a las resoluciones de Naciones Unidas y la UE, Gibraltar siga siendo Británico. Es esta falta de voluntad de nuestros propios líderes nacionales y locales por encontrar una solución, que esta humillante situación se mantiene viva.


Con la ley de Nuestro lado Gibraltar es Español


El derecho internacional que ha apuntalado sólidamente la posición de España frente a la doble demanda por parte de la colonia, una reclamando un supuesto "derecho a la autodeterminación" y otra que sería la permanencia de esta, bajo la autoridad británica.


A modo de ejemplo: La Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR) donde se define el derecho de las naciones a poseer aguas territoriales definiendo sus límites concretos. También las leyes de la propiedad que afectan a las ocupaciones y apropiaciones de tierras cometidas por las fuerzas británicas sobre el Istmo de Gibraltar. También las diferentes sentencias y leyes aprobadas por el pleno de la Unión Europea, donde se define este territorio ocupado como una colonia dando así razón a España y contradiciendo la posición británica. Las 6 resoluciones sancionadas por Naciones Unidas y aprobadas por una mayoría amplia del consejo general en las que exige a Reino Unido, la descolonización de Gibraltar y su restitución a España, exigencias que los británicos nunca cumplieron y sigue pendiente. Todas han dado la razón a España, pero el Reino Unido no ha querido atenderlas ni cumplir con ellas.


Las autoridades británicas, en una maniobra hábil, en 1967 cambiaron la condición de colonia al de Territorio de Ultramar, aprobando una constitución por referéndum que de facto (como todo en Gibraltar) supuso su independencia. De esta manera, Londres cargó el peso de su defensa, sobre la voluntad de los colonos por una mayoría aplastante, de seguir formando parte de la corona británica, voluntad expresada democráticamente olvidando a propósito, que los colonos no tienen derecho a decidir sobre el territorio que ocupan ilegalmente. Y es que esta ha sido la característica más destacable de las relaciones de la colonia con España, su permanente juego del embuste, la trampa y el engaño para conseguir siempre salirse con la suya.

 

La mejor evidencia de la toxicidad de nuestros vecinos de la colonia es repasar como Gibraltar lleva 300 años promoviendo una guerra silenciosa contra España. 300 años de humillación permanente, voluntaria y consciente por parte de los habitantes del Peñón y de sus autoridades contra los ciudadanos y vecinos de la Bahía de Algeciras, y contra los intereses de España. En este prolongado periodo colonial, los británicos de manera astuta, han ido expandiendo su territorio, desbordando los límites establecidos por el tratado de Utrecht a costa de robar a España el Istmo y las aguas españolas. 


Gibraltar y aguas ocupadas
Las líneas punteadas representan los reclamos británicos, la zona naranja dentro del Puerto de Gibraltar indica el territorio de soberanía británica reconocido por España. Como se aprecia, las aguas que reclama el peñón penetran en la zona de costa de la Línea, San Roque, Los Barrios y Algeciras. 
 

Una Relación desigual de abuso contra España


Tanto para el gobierno español como para el británico, el ruido de sables sobre Gibraltar ha provocado una oleada de patriotismo que distrae la atención del asunto importante. Los enfrentamientos por Gibraltar, en manos de nuestros políticos, no pasan de ser un recurso al que echar mano para desviar la atención de los escándalos internos, una serpiente de verano sin un plan organizado detrás para recuperar Gibraltar. El objetivo final de todo gobierno en España tiene que ser el mismo que debería haber sido, el de todos los gobiernos españoles desde 1713, cuando el Tratado de Utrecht confirmó el dominio indefinido de Gran Bretaña sobre el Peñón: su regreso a España. Y lo triste es que llevamos 300 años y la cosa no parece que vaya a solucionarse ni este, ni el año que viene y puede que ni en esta década. 

 

Esos 300 años no han servido para que los ocupantes de Gibraltar, conocidos popularmente como "Llanitos", hayan aprendido a apreciar y estimar a sus vecinos españoles. Al contrario, hoy nos odian con la misma intensa fuerza y desprecio del primer día. Recelan ante nosotros y sienten un profundo rechazo por todo lo que es y simboliza España. No nos han agradecido que les hayamos dejado entrar en nuestro país. Nos han agradecido que les hayamos dejado hacer negocios en nuestro país. No han agradecido que les hayamos ayudado cuando tuvieron varias epidemias, incluso permitiéndoles utilizar tierra española que luego se apropiaron, el istmo. 

 

Hemos permitido a sus habitantes y a miles de turistas que al año visitan el peñón, utilizar nuestras carreteras y atravesar nuestras aguas para acceder a la colonia ya sea con barcos de recreo o buques de suministros, lo cual no tenemos obligación de hacer al tratarse de aguas territoriales. Pero los españoles que de si, somos buena gente y actuamos con nobleza, a veces parecemos tontos de tan ingenuos. Bueno hay que decir que también la corrupción y el entreguismo de nuestros dirigentes ha contribuido en gran medida a privilegiar la colonia. Ya en el propio tratado de marras por el cual los españoles, sin enterarnos, cedimos la propiedad del peñón (que no la soberanía), el propio Rey Felipe V manifestaba una loable compasión a cuenta de las obligaciones hacia la población del peñón y su supervivencia cuando dijo: 

 

"Y como la comunicación por mar con la costa de España no puede estar abierta y segura en todos los tiempos, y de aquí puede resultar que los soldados de la guarnición de Gibraltar y los vecinos de aquella ciudad se vean reducidos a grandes angustias, siendo la mente del Rey Católico sólo impedir, como queda dicho más arriba, la introducción fraudulenta de mercaderías por la vía de tierra, se ha acordado que en estos casos se pueda comprar a dinero de contado en tierra de España circunvecina la provisión y demás cosas necesarias para el uso de las tropas del presidio, de los vecinos y de las naves surtas en el puerto." -Artículo X del Tratado de Utrecht por el que España pierde Gibraltar-

 

Todas estas generosas cesiones a la colonia por parte de los españoles, las hemos realizado sin exigir compensación alguna y durante más de 40 años, aguantando como contraparte, el victimismo de los llanitos, sus insultos a España y los españoles. Así, hemos suministrado por amor al arte, líneas de teléfono, de luz, hemos reciclados sus aguas residuales que vertían sin control a las costas de la Bahía, hemos facilitado su acceso a agua potable y todo de forma, repito, desinteresada, atendiendo al trato de buena vecindad que los españoles damos a nuestros vecinos.

 

El Diálogo es imposible y la única salida es cumplir con las resoluciones de las Naciones Unidas

 

Los colonos que son profundamente astutos, han sabido aprovecharse de estas concesiones para ir más allá de lo establecido en la letra de Utrecht, abusando de nuestra confianza. Solo hay que repasar la historia de contrabando, piratería, tráfico de capitales, paraíso fiscal de Gibraltar con el mapa de arriba en la mente, para comprobar hasta donde ha llegado la rapacidad de los colonos. Llegan a reclamar como propias aguas que no le pertenecen. Levantando una verja en 1909 para separar físicamente una parte de España, el municipio de la Línea, de la otra, apropiándose del Istmo que es de toda ley territorio de España. Incluso, en el colmo des descaro, instalando en el mismo istmo un aeropuerto internacional que se adentra en aguas del municipio de la Línea. Aeropuerto que ahora el estado español, en el colmo de la imbecilidad, reconoce como legal y solicita su uso conjunto.   

 

Entonces, les hemos ofrecido nuestra mano para llegar a acuerdos que ellos mismos luego han violado cuando les ha convenido. Con la colonia no se puede negociar, 300 años de experiencia son la mejor evidencia. Pero nuestros políticos empeñados en no enterarse, o a sabiendas, siguen dándose cabezazos contra una realidad tozuda, que los llanitos no quieren ser españoles y que toda cesión solo servirá para reforzar sus intereses y ampliar su influencia. 

 

Es imposible llevarse bien con una población empeñada permanentemente en atacarnos y hacernos daño. ¿Por qué son así? es muy difícil encontrar razones lógicas a este odio irracional contra España y contra los españoles. Bueno, dirá alguno, son ingleses, ya se sabe que los británicos siempre han envidiado a España y nos han combatido, sin embargo, los habitantes de la colonia en gran parte no son ingleses de verdad, estos apenas representan el 20% del total de la colonia. El grupo mayoritario y con diferencia sobre el resto, es de los andaluces en un 30% y creciendo. 

 

El resto se reparte entre italianos, marroquíes y otros grupos que conformando una variopinta población mestiza que ha encontrado en el nacionalismo colonialista un poderoso aglutinante y en la pertenencia al Reino Unido un estímulo para el supremacismo antiespañol. Gibraltar es una colonia militar no olvidemos eso y posiblemente este sea el principal determinante del carácter ultranacionalista, fascistoide y arrogante del pueblo que ocupa el legendario Mons Calpe

 

Pero quizás, se trata más de una combinación de intereses. Tal vez tenga mucho que ver el resentimiento innato de la influyente comunidad judía que habita Gibraltar, profundamente antiespañola; o cualquier otra razón quien sabe. El caso es que los numerosos intentos que hemos hecho los españoles por tender puentes de entendimiento con los llanitos, cediendo incluso aguas y territorio propio (en el colmo de nuestra estupidez, les hemos permitido construir un aeropuerto internacional en aguas jurisdiccionales españolas, casi "ná"), han sido sistemáticamente volados por las autoridades gibraltareñas. No podemos seguir haciendo el tonto, este tipo de cesiones permanentes demuestran una gran falta de visión estratégica sobre el importante papel geoestratégico que el peñón ocupa en el control marítimos del estrecho. Con los británicos, ni hay convivencia, ni acuerdo posible, o ellos o nosotros. 

 

Y esta situación injusta de maltrato y abuso, qué los políticos de Gibraltar y sus ciudadanos han cometido contra el pueblo andaluz y contra España, hay que denunciarlo. Porque ahora Gibraltar sale en cadenas de televisión como antena 3 o Tele 5. Dónde se dedican reportajes para felicitar que ya no llevan mascarillas y que todos están vacunados en el peñón.  Las televisiones del régimen socialista, pagadas por el gobierno de Sánchez, quieren normalizar la existencia de la colonia y parece que nos están preparando para que aceptemos el acuerdo que Pedro Sánchez bajo mano a cerrado con el gobierno británico. Según este acuerdo post Brexit, Gibraltar se convertirá en una nación independiente.


Gibraltar supone un riesgo ecológico


Pero es que además de todo el perjuicio económico, social y político, la colonia de Gibraltar representa foco permanente de contaminación y una amenaza para el medioambiente. La economía productiva de Gibraltar, está orientada a prestar servicios marítimos a buques cargueros y petroleros que pasan por la zona en dirección al puerto de Algeciras o para atravesar el estrecho. Gibraltar se ha convertido en el principal proveedor de combustible en alta mar, actividad conocida como "bunkering". Gracias a su baja fiscalidad y a la falta total de control en las operaciones de reportaje, se abarata el coste y reduce el tiempo, agilizando las operaciones lo cual convierte a la colonia en un proveedor de servicios muy atractivo para navieras del tercer mundo con pocos escrúpulos.

  

La consecuencia para nosotros, es que sus actividades marítimas son altamente agresivas con el medio ambiente. La limpieza de los cascos de buques, de sus depósitos, el mantenimiento de petroleros, los tratamientos químicos, el suministro de combustible a través de gabarras en alta mar, han causado numerosos vertidos de combustible y accidentes en el puerto dónde se acumulan depósitos de hidrocarburos y de aguas sucias que acaban cubriendo de negro las aguas cristalinas Bahía de Algeciras. 

 

Al respecto, ha habido varias denuncias de organizaciones ecologistas, así como de la propia Unión Europea. Pero como siempre la colonia hace caso omiso a los avisos y a las exigencias de respeto al medio ambiente. A todo ello hay que añadir la permanente presencia de una base naval de la Royal Navy en la cual se realizan tareas de mantenimiento de submarinos nucleares y buques de guerra. El riesgo radioactivo para la zona, es muy alto, más que en cualquier otra región de la península puesto que los submarinos nucleares británicos son antiguos y en muchos casos presentan graves fallos en su seguridad. El rastro de incidentes y las visitas de estos sumergibles para ser reparados, son habituales durante el año cómo han apuntado organizaciones como Verdemar en el Campo de Gibraltar. 

 

Hoy se hace más necesario que nunca emprender la lucha por recuperar el Peñón. 

 

Como la mujer maltratada, la sociedad española a naturalizado al maltratador. Hemos aceptado, con normalidad, la presencia de una colonia militar en el sur de Europa, en pleno corazón de Andalucía. Es una vergüenza, Europa no tenía colonias desde la época de los romanos. El empeño de nuestra clase política, por convencer a los españoles, que Gibraltar es un vecino más, resulta profundamente asqueroso. La colonia de Gibraltar es el recuerdo permanente de que España vive una anomalía histórica. Por eso el valor que el lector encontrará en estas páginas es el valor de la acción, de la participación, de la concienciación para movilizar un frente de acción que consiga finalmente expulsar a los invasores de nuestra tierra. 

 

En estos tiempos de desconcierto, parece que no hay sitio en el corazón de los españoles para Gibraltar, la sociedad española vive de espaldas a Gibraltar por culpa de la desidia y la indolencia de nuestras autoridades y de nuestra clase intelectual. Gibraltar no es más que otro de los síntomas de la enfermedad mortal que padece la nación española. Somos un país sin espíritu, qué permanece de rodillas frente a sus enemigos, que carece de una política de defensa, ni de un proyecto histórico. Solo hay que ver qué cada vez nacen menos españoles. Lentamente, España se disuelve como un azucarillo en aguardiente. 

 

Hoy en día, vivimos rodeados por una sociedad bulliciosa hedonista; una sociedad alienada, de ciudadanos desorientados, que viven de espaldas a su propia historia. El grito Gibraltar Español ha quedado como una peculiaridad folclórica de una minoría de patriotas nostálgicos a los que nadie presta mucha atención. Y es probable también, que muchas personas asocian el grito Gibraltar español a una ideología concreta, sobre todo esto sucede con simpatizante de izquierdas que confunden la ideología con el sentimiento patriótico. Gibraltar español es un grito que traspasa partidos, es un grito de todas las clases y de cualquier movimiento que se quiera unir, porque este lema representa justica y democracia. Lamentablemente, la izquierda ha renunciado a esta batalla y se ha entregado sin ofrecer batalla al enemigo a cambio de nada. Por eso, hoy más que nunca es necesario alzar la voz y ondear las banderas de la justicia histórica, reclamando alto y claro que no renunciamos a Gibraltar y qué Gibraltar fue, es y será español. 

 

Te animamos a que participes activamente, que colabores con nosotros allá donde estés, ya sea través de nuestro grupo o por medio de otras plataformas. No queremos patrimonializar la causa, al contrario, necesitamos que se activen grupos y ciudadanos por toda España para desbordar el "statu quo" presente marcado por el inmovilismo. Con el mismo fin por bandera, promovemos la multiplicación de focos convergentes al mismo objetivo, expulsar la colonia británica que ocupa Gibraltar. Por ello te animo, si tienes algún partido político, alguna asociación, página en redes sociales, plataforma, fundación y quieres que la demos a conocer ponte en contacto con nosotros. 


Tenemos que llevar la verdad al ciudadano, dar la batalla contra las mentiras de los colonos y sus aliados en nuestra sociedad. Despertar una fuerte conciencia sobre el grave problema que representa para los españoles la colonia de Gibraltar. Estamos creando una red para impulsar la causa por la recuperación de Gibraltar y necesitamos la ayuda de todos. 

Gibraltar es español ayúdanos a recuperarlo.

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